Representantes del equipo científico y jurídico de la ONG Defensa Ambiental, organización que integra la Alianza Humedales Andinos, desarrollaron durante septiembre un trabajo en terreno en la Región de Antofagasta con el objetivo de levantar inquietudes y necesidades de las comunidades indígenas de Ollagüe y Chiu-Chiu, respecto a la preservación de salares y humedales de la zona altoandina.
Cynthia Escares, bióloga marina y miembro del equipo científico de la ONG, explicó que en Ollagüe el equipo realizó trabajos en terreno para identificar afectaciones en los humedales cercanos a la comunidad. “La idea fue reconocer estos sitios y georeferenciarlos, ya que hemos estado trabajando en distintas líneas con ellos, como derrames de petróleo, sondajes mineros y otros tipos de contaminación”, señaló Escares. Durante la visita, se documentaron las afectaciones que impactan a la comunidad local, visitando los lugares indicados por los propios habitantes.
En Chiu-Chiu, la visita se dividió en dos partes. El equipo se trasladó a la Laguna Inka Coya y su humedal circundante, donde se evidenció el área que la comunidad desea establecer como Zona de Protección. Además, se realizó un taller educativo dirigido a niñas y niños de quinto a octavo básico de la escuela Escuela San Francisco De Chiu Chiu, enfocado en la importancia ecosistémica de los humedales andinos, con especial atención en la Laguna Inka Coya.
Por su parte, Ricardo Frez, abogado de la ONG, destacó la alianza con las comunidades indígenas del norte, específicamente con la comunidad de Ollagüe. “Nos encontramos realizando acciones para la conservación y resguardo de los salares y humedales de la cordillera, anticipando estrategias legales de defensa frente a las principales amenazas, como la extracción minera”, afirmó.
Durante la visita al Salar de Ascotán, Frez señaló que la comunidad ha expresado su preocupación por los sondajes mineros proyectados en la zona, que podrían afectar gravemente el ecosistema y la biodiversidad del lugar. “Estos ecosistemas albergan especies de distintas categorías de conservación que verán afectado su hábitat si se lleva a cabo la explotación minera”, agregó.
La ONG Defensa Ambiental, junto con la Alianza de Humedales Altoandinos, continúa trabajando en la vinculación con el territorio, ofreciendo apoyo a las comunidades en sus esfuerzos por proteger los salares y humedales altoandinos. “Este trabajo con la comunidad indígena de Ollagüe comenzó hace un año y ha escalado hasta transformarse en un apoyo crucial para la defensa y preservación de su territorio”, concluyó Frez.